¿Y si mi pareja tiene un Uso Problemático de la Pornografía?
El Dr. Carlos Chiclana fue invitado a impartir una masterclass en la Universidad Internacional de Catalunya sobre la Conducta Sexual Compulsiva. Uno de los temas que se abordó fue cómo ayudar a las parejas de quiénes presentan un UPP.
Cuando te enteras de que tu pareja tiene este tipo de comportamientos, te pueden asaltar muchas preguntas como estas: ¿Es falta de compromiso? ¿Tiene miedo a perder una parte de él? ¿Es falta de comunicación conmigo? ¿Busca inconscientemente ser malo? ¿Está buscando siempre sensaciones nuevas? ¿Me quiere? ¿Es igual que una infidelidad? ¿Realmente quiere una relación conmigo o le gusta la vida que lleva conmigo y por eso la quiere mantener de cualquier modo? ¿Es debido a comportamientos anteriores? ¿Qué he hecho yo mal para que tenga una vida sexual alternativa a mí y más aún desde el principio de nuestra relación? ¿Es satisfactoria su vida sexual conmigo?
En ocasiones se puede desarrollar entre ambos una narrativa que genera mitos: no lo quería hacer; como tú no me lo dabas lo tuve que buscar fuera; es que estaba estresado; es que en mi familia de origen era lo habitual; no es para tanto y no entiendo cómo te puede afectar tanto; todo el mundo lo hace; es algo genético o de las hormonas; es que tengo un deseo sexual muy alto; me salen cosas en internet; creía que no te importaba.
Todo esto no es el problema, el problema es que está realizando una conducta que le destruye y destroza a la pareja. Es necesario aceptarlo y tomar medidas.
A la vez es lógico que si tú eres la persona dañada te asalte la vergüenza y quieras callar, esconder o negar la realidad, sentirás humillación y que te han tratado con desprecio.
Como resumen de ideas prácticas, se deliberaron las siguientes tareas:
1.- Hablar abiertamente del problema y poner las cosas en claro.
2.- Formarse y conocer el problema. Lecturas. Información.
3.- Acudir a un profesional que haga un diagnóstico adecuado.
4.- Cuidarte y protegerte. Límites y condiciones oportunas, tener vida propia.
5.- Valorar si realizar analíticas de enfermedades de transmisión sexual.
6.- Darte tiempo y darle tiempo.
7.- Darle a tu pareja la responsabilidad de curarse.
8.- Evitar el control y vigilancia de sus actividades.
9.- No convertirse en salvador, cuidador o protector.
10.- Valorar acudir a los grupos de parejas de sexólicos anónimos.